La Anatomía Patológica (AP) estudia las causas, efectos y extensión de las enfermedades a través de las alteraciones estructurales que producen en las células y tejidos, así como las respuestas a los tratamientos. Actualmente los avances tecnológicos permiten, en el campo de las neoplasias, evaluar factores pronósticos y la detección de moléculas diana de fármacos específicamente dirigidas contra las mismas. En su vertiente clínica, asistencial, el objetivo de la AP es proporcionar información útil para la atención de los pacientes, con la mayor rapidez y fiabilidad posibles y con una utilización adecuada de los recursos.


La AP ocupa un lugar crucial en los aspectos docentes y en la investigación debido a que constituye un puente entre las ciencias básicas y su aplicación tecnológica y es absolutamente necesaria para comprender y construir el conocimiento médico. La AP quedó establecida como una disciplina de rango académico a finales del siglo XIX y se reconoció la actividad específica de ciertos médicos como anatomopatólogos. aunque sus conceptos y procedimientos sólo se usaban con fines diagnósticos. Sin embargo, a principios del siglo XX la evolución conceptual y tecnológica de la Medicina y la Cirugía y de la propia AP, condujeron al desarrollo, principalmente en Estados Unidos, de la AP en su vertiente clínica: La AP quirúrgica. Esta acabó asentándose como una parte esencial de la práctica médica. Algunos de los hitos tecnológicos que han marcado la evolución de la AP diagnóstica, además del desarrollo del microscopio, se refieren a continuación:

  • 1857: Aplicación del microscopio al diagnóstico (Siloniz)
  • 1870: Introducción de la biopsia quirúrgica como elemento diagnóstico esencial (Ruge y Veit)
  • 1880: Inclusión de tejidos en parafina para mejorar las secciones histológicas
  • 1889: Demostración de la necesidad de un diagnóstico histológico previo en intervenciones de tumores o mutilantes (von Esmarch).
  • 1891: Primera biopsia intraoperatoria estudiada en cortes de tejido congelado (Welch).
  • 1928: Citología diagnóstica del cáncer de cerviz uterino (Papanicolaou)
  • 1930-40: Introducción de la biopsia con aguja fina.
  • 1935: Cultivos de tejidos aplicados a la clasificación de tumores (Murray, Stout)
  • 1938: Desarrollo del criostato para histoquímica y enzimática. ( Linderström-Lang)
  • 1941: Desarrollo de la técnica de inmunofluorescencia (Conns)
  • 1943: Aplicación de métodos morfométricos en tejidos
  • 1950: aplicación de la Microscopía Electrónica para estudiar tejidos y tumores.
  • 1961: desarrollo del criostato para uso intraoperatorio (Chang)
  • 1966: Introducción de los conjugados de enzima y anticuerpos (Nakane y Pierce), base de las técnicas inmunohistoquímicas en secciones de tejidos, congelados o incluidos en parafina.
  • 1970: Aplicación de la microespectrofotometría, citometría de flujo.
  • 1980, en adelante: Desarrollo de la patología molecular: técnicas de Hibridación "in situ",citogenéticas, de PCR, micromatrices, proteomica, aplicadas a tejidos patológicos humanos.

La aplicación progresiva de estas innovaciones a la práctica diaria ha permitido el desarrollo de las capacidades diagnósticas de los laboratorios de AP y cumplir sus objetivos:

  1. Diagnóstico de las enfermedades.
  2. Establecer factores pronósticos de las mismas.
  3. Selección de pacientes para recibir determinados tratamientos.
  4. Monitorización y respuesta al tratamiento de determinadas enfermedades.
  5. Investigación clínica.
  6. Docencia.
  7. Control de calidad de la asistencia clínica.

Por su posición como servicio central, por su capacidad de cambio y puente en la aplicación de las técnicas desarrollada por las disciplinas básicas, los servicios de AP son básicos dentro de la estructura de un hospital. Es necesario potenciarlos para responder con rapidez y flexibilidad a los cambios revolucionarios que implican los nuevos conocimientos aportados por la biología molecular y la genética.


Como ejemplo de lo anterior dentro de nuestro ámbito, el grupo de Investigación en Cáncer de la FJD se constituyó hace cuatro años con la idea de contribuir a mejorar el tratamiento del cáncer de mama mediante el estudio de las vías implicadas en supervivencia y muerte celular. Está integrado por miembros del servicio de Anatomía Patológica, con experiencia en proyectos de investigación enfocados al estudio de mecanismos de supervivencia y muerte celular en cáncer. Aunando investigadores básicos y traslacionales con una experiencia científica y clínica de más de quince años, el equipo pretende asentarse con una orientación muy definida de carácter traslacional.


Funciones generales del servicio de A. Patológica:

Estudio de la etiología, patogenia y expresión morfológica de las enfermedades, y su correlación con la clínica. Su actividad se distribuye en tres áreas funcionales, bien definidas, aunque con frecuencia interconectadas:

  • Patología quirúrgica (biopsias diagnósticas y estudio de piezas quirúrgicas).
  • Citopatología.
  • Autopsias.

Se utilizan métodos fundamentalmente morfológicos, macro y microscópicos, siempre sobre la base de la correlación clínica. Requiere la realización de técnicas en laboratorios específicos (general, citología, inmunohistoquímica, microscopía electrónica, biología molecular). Estas actividades son llevadas a cabo por distintas personas, distribuidas en estamentos, con las siguientes FUNCIONES:


Medico Patólogo:

  • Descripción macroscópica e inclusión de las muestras biológicas para su procesamiento en el laboratorio. Realización de iconografía de estas.
  • Estudio microscópico de las muestras.
  • Solicitud de técnicas especiales.
  • Elaboración de un diagnóstico final expresado en un informe.
  • Realización de estudios necrópsicos.
  • Supervisión de todos los procesos anteriores.
  • Participación en las actividades docentes y de investigación propias del Servicio.
  • Realización de acciones, gestión o administración encargadas por el responsable del Servicio, fundamentalmente en relación con la planificación, organización, control y toma de decisiones en el ámbito del Servicio.

Técnicos:

  • Recepción y control de las muestras y hoja de petición, consultando al médico cualquier duda o problema al respecto.
  • Descripción macroscópica e inclusión de las muestras biológicas para su procesamiento en el laboratorio. Realización de iconografía de estas.
  • Procesamiento en los laboratorios de las distintas muestras biológicas en función de sus características.
  • Realización de las técnicas complementarias o fundamentales para el diagnóstico.
  • Preparación de reactivos.
  • Específicamente, los citotécnicos realizan, además, preparación y despistaje de las muestras citológicas.
  • Llevar un inventario y mantenimiento de los equipos y reactivos del laboratorio.
  • Cuantificación de la actividad diaria.
  • Colaboración en los programas docentes y de investigación en los que participe el Servicio.

Personal administrativo:

  • Transcripción de informes en sus distintos apartados.
  • Creación y mantenimiento de archivos de informes.
  • Distribución de informes a los distintos servicios petitorios.
  • Control y elaboración de la correspondencia externa e interna.
  • Solicitud de documentos del Servicio en depósito
  • Atención de las llamadas de centralita.
  • Atención administrativa personalizada a los distintos miembros del Servicio de Anatomía Patológica.

Personal auxiliar clínico:

  • Limpieza y mantenimiento de equipos generales.
  • Limpieza y mantenimiento de instrumental.
  • Ayuda en las áreas del laboratorio (fichado y transporte de bloques de parafina y reactivos).
  • Control de almacenes y peticiones de fungibles.
  • Ayuda en el reparto de informes y correspondencia.

Técnicos de autopsias:

  • Evisceración y reconstrucción del cadáver.
  • Traslado de piezas macroscópicas.
  • Mantenimiento de la sala de autopsias y del instrumental utilizado en la misma.
  • Cuidado, conservación del cuarto "húmedo" (piezas y biopsias conservadas en formol temporalmente).
  • Eliminación de residuos orgánicos.
  • Archivado de bloques, preparaciones y material de fotografía.
  • Control de almacenes y petición de fungibles.

Independientemente de las funciones específicas, todo el personal debe estar mentalizado e implicado en la atención directa a los pacientes. Más específicamente, el personal administrativo atenderá las peticiones de información (de carácter no clínico) solicitada por el personal facultativo de la Clínica, siendo la información de carácter clínico (como es lógico) de responsabilidad exclusivamente médica.