Biopsias vertebrales
¿Qué es y para qué se realiza?
La biopsia vertebral es un procedimiento mínimamente invasivo que permite obtener una muestra de tejido óseo de una vértebra. Se indica cuando una prueba de imagen sugiere una posible lesión ósea y se necesita confirmar su origen para orientar el tratamiento.
¿Cómo se realiza?
- Se lleva a cabo en la sala de angiografía, con el paciente tumbado boca abajo.
- Bajo anestesia local y sedación, se introduce una cánula fina guiada por rayos X o tomografía computarizada hasta la vértebra.
- Se extrae una pequeña muestra de hueso para su análisis.
- El procedimiento dura aproximadamente 30 a 60 minutos.
¿Qué preparación requiere?
- Ayuno de 6 horas antes del procedimiento.
- Informar al equipo médico si toma anticoagulantes o tiene alergias.
- Puede requerirse suspender ciertos medicamentos antes de la prueba.
¿Qué riesgos existen?
Aunque poco frecuentes, pueden incluir:
- Sangrado o hematoma en el sitio de punción.
- Dolor persistente.
- Fiebre o malestar general.
- Infección en casos raros.
- Cambios en la sensibilidad o movilidad.
El equipo médico está preparado para actuar ante cualquier complicación.
Cuidados posteriores
- Reposo en la unidad de recuperación durante unas 4 horas.
- Evitar esfuerzos físicos durante 3 a 5 días.
- Mantener la herida limpia y seca.
- No conducir el mismo día del procedimiento.
¿Cuándo estarán los resultados?
Los resultados suelen estar disponibles en unos días, tras el análisis por el servicio de Anatomía Patológica. Se agendará una cita para revisar el informe y decidir los siguientes pasos.