Las organizaciones excelentes valoran a sus personas y crean una cultura que permite la consecución de los objetivos de la organización y de los objetivos personales de manera mutuamente beneficiosa. Tales organizaciones desarrollan las capacidades de sus personas y promueven la equidad y la igualdad. Muestran interés por sus personas, mantienen la comunicación con estas, establecen un sistema de recompensa y de reconocimiento de sus empleados de una manera que motiva a las personas, fomenta la implicación y permite que su equipo utilice sus habilidades y sus conocimientos.

Nos lo explican el Dr. Joaquín García Cañete, coordinador de Urgencias, y Marta Hernández Segurado, jefa adjunta del Servicio de Farmacia Hospitalaria.